Esta mañana me ha llegado el testimonio de una opositora interina, con dos hijos, que llevaba presentándose desde el año 2000, y ahora por fin puede ya olvidarse de estar trabajando en el instituto y estudiando a la vez.
El testimonio nos relata la importancia del apoyo familiar y su organización, la única forma de poder compatibilizar ser madre, profesora y opositora.
«Ya han pasado algunos días desde que recibí este correo pero es ahora cuando puedo contestarte. La verdad es que este curso ha resultado muy duro de principio a fin. Al principio en septiembre, como ya iba con el chip de opositar, estaba concentrada en sacar el máximo número de horas posibles para el estudio y conforme avanzaba el tiempo la sensación de no poder llegar a tiempo hacía que todo el tiempo que no estaba trabajando o atendiendo mínimamente a mi familia lo pasase estudiando. El final de curso y el primer examen de la oposición el día 23 de junio dieron paso a interminables jornadas de programación y unidades didácticas. En definitiva, cuando terminé la defensa de la programación y la unidad didáctica el 17 de julio solamente estaba pensado en huir a la playa con mis hijos y mi marido independientemente de cual fuera el resultado de tanto esfuerzo, sin mirar atrás ni recordar lo que había sido este año. Recordaba el testimonio de una opositora que contaba cómo había querido escapar durante un tiempo de todo lo que le había rodeado durante ese último año y me daba cuenta de que yo estaba viviendo lo mismo.
Con el tiempo todo se serena y el rechazo a recordar desaparece. Nuestra vida pasa de modo opositor a modo normal, con los aprendizajes que ello ha supuesto. Esta es en muchos sentidos una experiencia vital y ahora entiendo porqué algunos compañeros del Instituto te cuentan hasta los más mínimos detalles de cuando ellos aprobaron y cómo han quedado grabados en su memoria.
A lo largo de todo el proceso he sufrido varios momentos bajos, por nombrar algunos citaré el inicial cuando no sabes qué especialidad preparar (por mi formación y experiencia docente podía preparar Economía, Administración de Empresas y Procesos de Gestión Administrativa) y de hecho ya había aprobado Administración de Empresas en otra convocatoria, aunque sin plaza. Esa parálisis por análisis que me mantuvo inactiva durante un tiempo dio como resultado una decisión de la que en algún momento dudé cuando vi el ratio de opositores por plaza convocada pero que al final fue la correcta.
Otro momento bajo se produjo en mayo cuando ya llevaba muchos meses de preparación pero sentía que no sabía nada y el agobio del curso estaba causando mella en mí. Decidí que necesitaba un punto de luz y una recompensa para cuando todo terminara, así que reservé unos días de vacaciones en la playa, en el hotel donde habitualmente nos hospedamos y coloqué la reserva impresa a mi izquierda, en mi mesa de estudio, de modo que cuando volvía a tener bajón la miraba y pensaba que la recompensa ya estaba cerca, que solo faltaba un poco más de esfuerzo.
El último momento de bajón tuvo lugar en el momento en el que el tribunal leyó los 5 temas extraídos en el sorteo. De los 36 temas que había preparado, incluidos los temas estrella, no salió ninguno !!!. Durante las últimas semanas de preparación mis compañeros interinos del instituto habían estado comprobando en un programilla la probabilidad de que te cayera un tema de los que habías preparado dependiendo del número de temas del temario. Con 37 temas había un 95% de probabilidad de que alguno de esos temas saliera pero resultó que ese 5% a veces pesa demasiado…. Los temas que salieron en el sorteo fueron: 3, 41, 50, 62 y 71…., Tierra trágame!! (pensamos la mayoría de los compañeros opositores de la sala) la verdad es que no sabía por dónde tirar…. Había leído por lo menos todos los temas una vez, algunos de ellos dos pero no los dominaba al 100%. Al final hice el 3 lo mejor que pude, aunque sin rigor matemático, pero el resultado fue bueno.
Creo que el tribunal valoró en el tema la estructura clara, (con índice, equilibrio entre los puntos, bibliografía..) la aportación de citas, autores, ejemplos… El momento de la lectura del tema creo que también es importante. Mostrar seguridad en lo que has hecho y defenderlo de la mejor manera posible. En la práctica la justificación de las operaciones a la hora de resolver los problemas, de manera que quedara redactado como en un libro, me ayudó a que la lectura de los problemas resultase más fácil. En el comentario de texto la relación de las ideas expuestas con las corrientes de pensamiento actuales y con los autores más relevantes creo que estuvo bien. La didáctica estaba muy trabajada, siguiendo el ejemplo de programación propuesto por ti, todo encajaba y se veía que tenía cuerpo y sentido. Las actividades propuestas supusieron un momento de máxima atención por parte del tribunal ya que a la vez que les explicaba algunas de las propuestas de gamificación ellos me pedían más ejemplos ya como interés personal (todos aprendemos con este proceso).
A lo largo de este año he leído los testimonios de muchos compañer@s opositores de otras convocatorias y me he visto reflejada en ell@s en muchas ocasiones. Es un proceso duro si estás trabajando además, si tienes hijos pequeños…. pero el esfuerzo al final merece la pena. El apoyo familiar resulta imprescindible si tienes que descargar parte de tus tareas en otros para ganar horas de estudio. En mi caso mi marido, mis padres y mis suegros han sido de gran ayuda, sin ellos no lo habría logrado. La necesidad de desahogarte sobre los temores y momentos de debilidad a lo largo del proceso también es importante, mi marido ha estado ahí apoyándome cada día. La comprensión por parte de mis hijos sobre la importancia que la oposición tenía en nuestra organización familiar. La estabilidad y la positividad a lo largo del proceso también son importantes ya que todas las experiencias nos hacen crecer. El día de la encerrona, el más difícil de todo el proceso para mí, tenía sensaciones parecidas al momento en el que di a luz a mis hijos. Momentos de muchos nervios, angustiosos y dolorosos pero a la vez liberadores de toda la carga que llevaba arrastrando a lo largo de este año y a partir de los cuales volvía a reencontrarme con mi familia al 100%, sin escatimarles atención.
PD:
- La probabilidad es caprichosa. En esta web si ponemos los 71 temas de Economía y las 5 bolas que nos sacan: http://www.educacionaragonesa.com/utilidades/probabilidadesoposicion.html
Vemos que con 36 temas hay un 98% de que nos entre uno de los cinco estudiados.
En general esto es lo que suele pasar, que te entre al menos un tema….pero todos los años tengo opositores a los que la diosa fortuna les da la espalda…no saca ni una sola bola….pero hacen el tema igual en base a lo que recuerdan….o en base a otros temas…y sacan de las mejores notas en ese tema.. Cuando uno tiene bien asimilados temas actuales, con citas, ejemplos actuales, estudios, autores actuales….es posible llegar a componer alguno que no ha estudiado en base a esos.
2. El apoyo familiar y su organización es fundamental en tener buenas posibilidades. Siempre digo que no oposita uno…sino su familia.
3. La gran OPE de 2018 y la que nos espera en 2020, al margen de todas las polémicas y la situación personal de cada uno , serán muy buenas para estabilizar las plantillas de los centros y se notará en el corto plazo en la calidad docente. Están consolidando su trabajo un gran % de interinos (en general el 75% de los interinos se están llevando las plazas, tal como estimé hace a un año), lo cual es muy bueno porque se retiene talento y experiencia, pero también ha dado la posibilidad a entrar en el sistema educativo a un 25% de sangre nueva. En Economía tanto jóvenes…como menos jóvenes…y en base a mi experiencia de preparador este año, todos ellos perfiles muy interesantes que van a aportar mucho al sistema desde todos los puntos de vista.
Una vez más…¿Cómo no voy a estar orgulloso de mis opositores?