Ayer un terremoto de tuits con este hashtag inundó los twitter docentes
¿Cuál fue el origen de esta tempestad?
El debate organizado por el Banco Sabadell entre Toni Nadal y David Calle
Pero realmente estos debates para pseudo-analizar la realidad educativa, no los suelen ver los docentes… además de que no tienen tiempo a final de curso, una cosa es que a los bancos les quede bien «la foto» de que les preocupa la educación…y otra el contenido de estas promociones sirva para mejorar el sistema educativo…y otra que los protagonistas acaben creyéndoselo…
El origen real viene de dos tuits de David Calle…
Este es el primer error de David Calle.
Es normal que uno «se suba» si comparte escenario con Toni Nadal en un plató…y si continuamente le demandan medios para actos públicos que tienen que ver con la educación.
Sobre David Calle, admiro su modelo de negocio, me parece que su aportación ha sido y es excepcional , genera una gran externalidad positiva y me hago una idea de todo el trabajo y sacrificio que tiene detrás. Los medios necesitan ejemplos mediáticos y él está de forma merecida en el sitio adecuado en el momento adecuado.
Si no hubiera escrito esos dos tuits, no habría sufrido la tormenta que ha sufrido…porque ningún docente habría visto el vídeo…y menos habría enfatizado su comentario sobre las quejas…Pero el error no ha sido tanto los tuits..como las respuestas a las respuestas de los tuits!
Me encuentro todos lo días personas que me «explican» cómo debería ser el sistema educativo público español en base a su experiencia en él (hace 25 años…) …o la de sus hijos…o la del colegio de sus hijos…y tienden a dar recetas mágicas generalizando sus experiencias… ¡Qué fácil sería solucionar la complejidad del problema educativo en 3 minutos con la ideas tan claras! ¡Pero es que es todo tan complejo!!
Que esto se haga en una tertulia, o un spot encubierto de educación de un banco, no es nada nuevo…pero escribir estos dos tuits a mediados de junio…con la carga de estrés y exigencia que tienen cualquier docente de centro público…es una total imprudencia si el tuit se hace viral.
El segundo error de David Calle.
¿Gratis? Es un modelo de negocio. No tiene nada de malo…no hay que avergonzarse ni ocultar la realidad.
¿Sacarse una ingeniería? Que intente sacarse la oposición de secundaria piensa la mayoría…a ver si el sistema nervioso le aguanta hasta las navidades… He tenido opositores verdaderamente brillantes…que a los tres meses han abandonado las oposiciones porque no soportan la carga de presión de la incertidumbre sobre el sistema nervioso que suponen las oposiciones educativas.
En twitter hay un % de usuarios (sí, incluso entre los docentes) de una agresividad enfermiza, malas formas y absoluta falta de educación y empatía.
Es humano que a uno le duelan esos comentarios..pero contestarlos con otros tuits no bien reflexionados aumenta la indignación del usuario medio..es echar más gasolina…..y la hoguera se enciende más… al final en twitter muchos usuarios no ven las respuestas en las que te han insultado..pero sí ven tus contestaciones y les parece totalmente fuera de tono…y eso puede afectar a tu imagen.
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Consejo para David Calle
Entiendo que estés afectado, porque es muy duro e injusto soportar esa «jauría irracional de twitter» . Yo lo relativizaría, cuando pasen unos días te darás cuenta que ha tenido mucha menos importancia de la que parece. Tus usuarios/clientes te seguirán admirando…y los docentes que te ven como pseudo-docente te siguen viendo igual que antes…No creas que es un % alto…pero sí muy presente y activo en las redes sociales. Más o menos un 30% de los docentes reales les molesta que se pongan ejemplos de docentes alejados de la realidad (un 10% lo muestran con agresividad como has visto estos días) y al otro 70% le es totalmente irrelevante…
Tú público objetivo no son los docentes de escuela pública…provocar su rechazo no va tener consecuencias sobre los usuarios de unicoos y de tu academia, pero sí sobre encargos de administraciones públicas y empresas privadas. Lo de este fin de semana no es irreparable ni mucho menos, pero sí una lección para todos de la irracionalidad de la conducta humana y de cómo gestionar la jauría de twitter.
